Pablo Alborán presenta Castillos de Arena, una bonita balada que llega con una verdadera lección de vida. Habla de volver a empezar y de tener esperanza en recuperar todo lo perdido.
La canción producida por el mismo artista junto a Paco Salazar nos demuestra que, aun atravesando momentos complicados, siempre hay un rayo de luz que nos regala la ilusión de poder tener nuevos comienzos.
El videoclip del tema muestra un mundo distópico y apocalíptico en el que él interpreta el papel de un astronauta que aterriza en dicho mundo. Se encuentra con un niño, que es el único habitante que queda junto a él. Es este el que le da la esperanza que tanto necesitaba y la ilusión de que se pueden empezar nuevos caminos